Vivir el presente

Aprovecho un rato en la que no me han suministrado mucho morfina y que todavía tengo la cabeza bastante clara para hacer un nuevo post. Ahora no podré publicar de forma continua los lunes como hacía hasta hace quince días. El primer lunes sin escribir fue por los motivos que ya os he dicho. Efectos de la morfina. El segundo, estuvo algo diferente. Este fue ya estando ingresado en el hospital, donde resulta que a las pocas horas de estar tuve un paro cardíaco. Fue la familia quien sufrió estos momentos, momentos duros, ya que yo no me di cuenta de nada, pero en el momento de despertar, estaban todos los familiares con unas caras de tristeza considerable ya que los médicos no creían que volviera a despertar. Ahora todavía estoy en el hospital, me parece que estaré bastante días, ya que hay trabajo por hacer y tratar de ordenar el cuerpo.

Ayer vinieron los Reyes en el hospital y los niños y todos pasamos juntos un buen rato. He tenido suerte que el resto de fiestas las hemos podido hacer en casa. Lo que sí que duele es que el cumpleaños de mi hijo mayor lo haremos aquí. Pero esto no es lo más importante. Lo más importante es poder celebrarlo.

A menudo estos días pienso en eso. Disfruta del momento ya que está complicado salir de este pozo, de romper la estadística de los 5 años de la asociación de páncreas. Vive el presente. Yo aprendí a vivir el presente aún así los cambios que se producen te hacen pensar en el futuro. Un futuro que veo venir más corto de lo que yo esperaba en un camino que se hace largo.

Después de disfrutar los momentos navideños dentro mis posibilidades, ahora son los momentos sin dolor los que me hacen disfrutar. Disfrutar de mi entorno del que no me quiero separar y dejar un ocho a su corazón, a su vida. Esto es lo que me angustia si pienso más allá.